
PITÓN IZQUIERDO El patrón de Villa Charra es Carlos Bowser empresario
que tiene una veintena de años en el esfuerzo y Lucio Bojórquez su maestro
constructor que ha puesto lo mejor de su oficio y buena parte de su vida también
en una edificación que ambos han entregado a Tijuana, tan ultrajada y tan
querida. Una construcción sin ninguna de sus partes en calidad de mientras. El
resultado de momento, es un coso inconcluso que tiene una alta barrera de
primera fila y donde usualmente se extenderían los capotes de luces es una
balaustrada semicircular que da una apariencia más de mirador de paisajes que
de proezas taurinas y charras.

PITÓN DERECHO Ya que hoy tendremos corrida de toros se cierra la
totalidad del disco con portones metálico y se inicia el festejo de cuatro
toros y cuatro matadores. En el paseíllo más que de cortesía se escucharon palmas
de afecto porque dos de los cuatro toreros son de casa: César Castañeda y Pepe
Hillo. Óliver Godoy y Alfredo Díaz, El Conde, son de Guadalajara. Los cuatro de
alternativa y se ven concentrados para exprimir las oportunidades que les den
los toros en este frio atardecer tijuanense.

PITÓN IZQUIERDO, OTRA VEZ Esta situación aceptada por los cuatro
toreros los obliga a tomar riesgos en condiciones sofocantes. Su necesidad de
torear los fuerza a tragar paquete. Esta estrechez de oportunidades para los
toreros no sólo agobia a los toreros mexicanos. En la pasada temporada española
un torero se presentó ante toros toros, con una afición exigente y una sola
corrida en el último año. Este sábado 19 de noviembre de 2011, en esa circunstancia,
lo artístico se dio por momentos y se agradece que los toreos hubieran aceptado
torear y jugarse la vida en esas condiciones con tal de exponer su arte.


PITÓN DERECHO ¿Será destino inevitable de la fiesta que se mantenga
en este tipo de instalaciones habilitadas? Últimamente Tijuana tuvo dos plazas
de toros, una cedió el espacio para que se inflara el comercio globalizado en
el centro antiguo de la ciudad. La otra preside como señora de playas y oleajes
los atardeceres frente al mar. Villa Charra bien pudiera ser emblema de la
permanencia de la tauromaquia en la afición de los tijuanenses. ¿Qué sería de
la fiesta si no existieran esas opciones recónditas en México, Colombia,
Venezuela, Perú, Guatemala, España, Francia?
RECORTE Recordemos que en estos lares sufrimos la falta de escuelas
taurinas que son verdaderos viveros de la fiesta. Sin ellas casi sólo por
suerte se dan brotes silvestres de toreros que eventualmente llegan a ornar el
mundo taurino. Entonces, lugares como Villa Charra pueden ser enclaves
salvadores para los toreros que no ven un cuerno por mucho tiempo, que carecen
de cartel o de influencias, o de amistad con empresarios y que están deseosos
de intentar la obra de arte efímera que es el toreo. Óle por Villa Charra y sus
similares en todo el mundo taurino. Óle por El Conde, Castañeda, Godoy y Pepe
Hillo y sus colegas.